
Movilización
escolar en el Día Internacional para la Tolerancia
Nosotras y nosotros, estudiantes y profesores,
preocupados por la persistencia de actitudes, expresiones y comportamientos
que violan o denigran la dignidad y derechos de las personas;
Preocupados por la existencia de prejuicios, que encubren en el fondo un profundo desconocimiento hacia el prójimo, para justificar así la fobia al diferente, su discriminación o su exclusión, cuando no otras formas de intolerancia criminal;
Preocupados por el desarrollo de ideologías totalitarias, nacionalismos agresivos, integrismos religiosos y otras manifestaciones contrarias a los valores democráticos;
Alarmados por la intensificación de actos de intolerancia hacia colectivos vulnerables como los inmigrantes, gitanos y las diversas minorías étnicas, culturales y sociales que se producen en muchos países,
Alarmados en general, por el crecimiento de las manifestaciones de xenofobia, racismo, islamofobia, antisemitismo, homofobia y otras formas de intolerancia que siempre van ligadas al odio, a la discriminación y la violencia;
Defendemos la convivencia basada en el principio ético universal de la Tolerancia que consiste en el respeto, aceptación y aprecio de la diversidad de nuestro mundo y significa la supremacía del valor de la persona, de su dignidad y de sus identidades, e implica consideración y respeto a sus opiniones, creencias o cultura aunque no se compartan;
Afirmamos que la Tolerancia nunca debe ser entendida como indiferencia, resignación, pasotismo ó condescendencia y que tampoco tiene sentido interpretarla como debilidad de las convicciones propias o en sustitución de derechos inalienables del ser humano. Y por el contrario, debemos interpretarla como una virtud individual, pública y social que requiere a su vez, intransigencia con la violencia, con el fanatismo en las ideas y con la conculcación de los universales derechos humanos.
En consecuencia, ante la realidad del mundo actual en el que se padece discriminación y persecución por razón de ideología, religión o creencias, por pertenecer a una etnia, nación, sexo u orientación sexual, por discapacidad, situación familiar ó enfermedad...;
Nos adherimos a los principios de Tolerancia y Solidaridad, libertad y justicia, pluralismo y diversidad cultural, diálogo y entendimiento a todos los niveles de la sociedad, que favorezcan una convivencia en paz y democracia;
Nos comprometemos a implicarnos cotidianamente en actuar por erradicar todas las formas de intolerancia, invitando a la ciudadanía a este compromiso, a mantener la solidaridad con las víctimas, y a educar a las actuales generaciones en la ética de la Tolerancia.
Preocupados por la existencia de prejuicios, que encubren en el fondo un profundo desconocimiento hacia el prójimo, para justificar así la fobia al diferente, su discriminación o su exclusión, cuando no otras formas de intolerancia criminal;
Preocupados por el desarrollo de ideologías totalitarias, nacionalismos agresivos, integrismos religiosos y otras manifestaciones contrarias a los valores democráticos;
Alarmados por la intensificación de actos de intolerancia hacia colectivos vulnerables como los inmigrantes, gitanos y las diversas minorías étnicas, culturales y sociales que se producen en muchos países,
Alarmados en general, por el crecimiento de las manifestaciones de xenofobia, racismo, islamofobia, antisemitismo, homofobia y otras formas de intolerancia que siempre van ligadas al odio, a la discriminación y la violencia;
Defendemos la convivencia basada en el principio ético universal de la Tolerancia que consiste en el respeto, aceptación y aprecio de la diversidad de nuestro mundo y significa la supremacía del valor de la persona, de su dignidad y de sus identidades, e implica consideración y respeto a sus opiniones, creencias o cultura aunque no se compartan;
Afirmamos que la Tolerancia nunca debe ser entendida como indiferencia, resignación, pasotismo ó condescendencia y que tampoco tiene sentido interpretarla como debilidad de las convicciones propias o en sustitución de derechos inalienables del ser humano. Y por el contrario, debemos interpretarla como una virtud individual, pública y social que requiere a su vez, intransigencia con la violencia, con el fanatismo en las ideas y con la conculcación de los universales derechos humanos.
En consecuencia, ante la realidad del mundo actual en el que se padece discriminación y persecución por razón de ideología, religión o creencias, por pertenecer a una etnia, nación, sexo u orientación sexual, por discapacidad, situación familiar ó enfermedad...;
Nos adherimos a los principios de Tolerancia y Solidaridad, libertad y justicia, pluralismo y diversidad cultural, diálogo y entendimiento a todos los niveles de la sociedad, que favorezcan una convivencia en paz y democracia;
Nos comprometemos a implicarnos cotidianamente en actuar por erradicar todas las formas de intolerancia, invitando a la ciudadanía a este compromiso, a mantener la solidaridad con las víctimas, y a educar a las actuales generaciones en la ética de la Tolerancia.